¿Pero qué es el liderazgo?

El liderazgo es el proceso de influir en las personas para orientar sus esfuerzos hacia una meta o metas específicas, este se determina por dos factores:

1) la posición de poder del líder, que es la autoridad formal que acompaña a un puesto y

2) la disposición que tiene el subordinado a obedecer.

“Un líder es la persona capaz de ejercer influencia en otros, para dirigirlos y guiarlos efectivamente hacia el logro de objetivos y metas organizacionales”.

Cambios significativos para fomentar el liderazgo

Uno jamás se pone a pensar que podría llegar a ser un líder, nadie nos prepara para ello. Incluso podrás pensar y decirte, “esto jamás me lo enseñaron”, “necesito un curso de liderazgo”, hoy en día existen miles de cursos acerca de “cómo ser un líder”, “que hacer y qué no hacer”, “Cómo ser el mejor líder” aunque ninguno garantiza que serás el mejor o que terminado el curso sabrás cómo llevar al capital humano de una empresa de la manera más óptima. La verdad es que se nace con ello, uno nace siendo líder, sin embargo no todos nacemos con ese don, pero la buena noticia es que podemos irlo desarrollando conforme a nuestras experiencias laborales, conforme los cursos, conferencias, capacitaciones, libros que leemos a lo largo de la vida, etc.

Pero no te preocupes, aquí te ayudaremos dejándote algunos tips ara que empieces a llevarlos a cabo con tu personal, la recomendación que te hacemos es que auto analices y auto califiques como te has venido desenvolviendo con tu personal y en tu trabajo, y definas y aceptes si has estado cometiendo errores con ellos, nunca es tarde para tomar un nuevo rumbo.

Ante el fracaso, enfréntate a él y aprende de tus errores.
Construir un buen equipo hará que el negocio mejore. Debes conocer la importancia del trabajo en equipo. Aprende en quién confiar e incluso a quién delegar tareas.
Confía en tu instinto y toma más decisiones. Recuerda la frase "Si no arriesgas, no ganas".
Existen las segundas oportunidades. No te martirices y mira a tu alrededor, existen multitud de segundas oportunidades, solo hay que aprender a buscarlas.
Aprecia tu responsabilidad como líder. Valora el impacto que tienen en los demás tus decisiones. Debes tener claro cuáles son tus principios y tus deberes para realizar bien esta función.
Autodisciplina. La poca disciplina que tengas, será suficiente para lograr cambios significativos en tu vida personal y profesional. No debes desperdiciarla con actos negativos.
Expresar gratitud. Eso contribuye a tu bienestar psicológico y mental así como a una mejor relación con tu personal.
Hábitos positivos. Los rituales una vez que son hábitos, los llevamos a cabo porque es como si salieras de tu casa sin cepillarte los dientes, ya no te sentirás cómodo si no los haces. Hábitos positivos, generan valores bien arraigados.
Aceptar el fracaso. Para seguir siendo útil y competitivo, hay que estar siempre aprendiendo y mejorando, es decir, hay que fracasar. En otras palabras, si bien el fracaso no garantiza el éxito, la ausencia de fracaso casi siempre asegura la ausencia de éxito.
Ejercicio físico. Contribuye significativamente a la salud mental. 30 minutos al día de cualquier actividad (caminar, nadar, andar en bici), fomentan la autodisciplina.